Dos hijos distinguidos: Raúl maratonista y Gonzalo visitante desde Chicago.

Hoy festejamos a Raúl, hijo de Felícitos, por su hazaña de correr el maratón de la Ciudad de México. 

Aquí lo vemos en pleno zócalo rehidratándose.

Mostrando la medalla que le fue otorgada junto con un ramo de flores.

Otra vez mostrando su medalla, pero ahora ya estábamos en La Rambla.

Una cara de la medalla.

Y el reverso.

Otra sorpresa que nos llevamos, fue cuando llegó Gonzalo Luna Jr. acompañando a su papá; aquí lo vemos saludando al Lobito.

Lobito y Gonzalo.

Sebastián y Gonzalo.

Gonzalo de la segunda generación; Alain y Sebastián de la tercera.

Captamos muy contentos a Raúl, su novia, Luis Alberto y Memo presumiendo la medalla.

Gonzalo no se quedó atrás y presuroso también se puso la medalla.

Y llegó la comida; como primer tiempo nos sirvieron esta rica sopa de tortilla.

Y para acompañar, los famosos bollos hechos en el horno de La Rambla.

Como segundo tiempo, una exquisita ensalada César.

Y como segunda opción, este atún a la vizcaína.

Como platillo principal, nos dieron a escoger entre cochinita pibil.

Y el tradicional mole poblano con pollo y arroz blanco.

Oportunidad que aprovechamos para obtener esta foto.

Formamos dos mesas de dominó; en la primera Gonzalo y Lobito en contra de Luis Alberto y Luis Rolando.

Otra foto de la misma mesa, pudiéndose observar la otra mesa al fondo. 

En donde jugaron Memo y Gonzalo Jr. en contra de Héctor y Sebastián.

Fin de la jornada y la foto de costumbre; de pie, Raúl, Luis Alberto Fonseca Brambila, Gonzalo Luna Abascal, Gonzalo Luna Jr., Memo Cázares Aguilera, Sebastián y Héctor Barrera Jiménez; sentados, Luis Rolando Figueroa Noriega; Lupita, Armando López Mendoza y la novia de Raúl.

Los dos Gonzalos con Raúl y Alain antes de emprender la retirada.

Gran festejo por los cumpleaños de Armando, Arturo y Sergio.

Hoy, lunes 25 de agosto, nos dimos cita en La Rambla, compañeros de la Generación y algunos amigos, para festejar a 3 miembros distinguidos. Uno fue Armando López Mendoza, mejor conocido por "Lobito", quien cumplió 92 años.

Otro fue Arturo Ortiz Marbán (a la izquierda de otro Arturo: López Martínez) quien cumplió 86 años.

Y el tercero fue nuestro querido "Calaco" Sergio Quezada Ramírez con 87 años.

Antes de la comida, Diego, nuestro mesero estrella dispuso una mesa con 4 botellas de LA Cetto Merlot, el mejor vino de Baja california.

Y así, con una copa, se abría la conversación conforme llegaban y se acomodaban en la mesa.

Captamos a Zoilo con dos de sus amistades.

A Lobito en medio de Lupita y de Arturo.

Arturo, mi tocayo Luis González S., Joel y Luis R.

Memo y Alain en los extremos, mientras que en medio quedaban 2 amigos de Arturo el cumpleañero.

Bruno, su esposa Jose y Vylma la esposa de Luis G.

Otro amigo de Arturo, colega de la Generación 78 (16 años después de nosotros), junto a mi otro tocayo Luis Alberto y Nacho.

Un nieto (Sebastián) y una hija (Bety).

Un nieto (Alain) y un hijo (Raúl).

Una vista de la mesa al inicio de la comida, que en términos cantineros viene siendo una botana de tres tiempos.

Para empezar y por ser un día especial, el chef nos dio gusto con un platillo solicitado desde que Felipe vivía: la sopa de brotes que, como su nombre lo indica, esta elaborada con brotes de varias verduras.

O en su defecto, esta sopa de fideos en guajillo.

Como segundo tiempo, lo que ahí llaman como plato campestre, que es chorizo en salsa verde sobre una gordita de chicharrón, coronada con trozos de lo mismo, es decir, chaqueta de cochino.

Y como platillo principal, una receta exclusiva de La Rambla: rollos de pechuga en salsa de chipotle sobre una cama de espagueti.

O bien, estas fajitas de arrachera a la poblana.

Entre tiempo y tiempo, Zoilo tomó la palabra para pronunciar sus discurso que como ya es costumbre, está cargado de conceptos filosóficos.

Y con expresiones que mueven a la reflexión.

Arturo no quiso quedarse atrás y pidió se le permitiera decir también algunas palabras y como no venía preparado, sacó una hoja tamaño carta a manera de acordeón.

Terminaba la comida y hubo de sacar otra foto por los que siempre llegan demorados.

Fin de la comida y todos posamos para la foto del grupo.

Aunque todavía quedaba una botella.

Presurosos tomamos nuestro lugar para la ronda de dominó.

Hasta que llegó el cuarto: Joel, que hizo pareja con Lobito, en contra de Luis Alberto y Luis Rolando, quienes generosamente nos dejamos ganar para no contrariar al cumpleañero.

Mientras en la otra mesa, mi tocayo y Bruno daban cuenta de Memo y Héctor.

Llegó la hora de apagar las velas, teniendo prioridad Lobito por ser el Decano.

Momento en que los tres se disponen a soplarse las velas.

A la una, a las dos y a las....

Con tan buena puntería y vigor que hasta humo sacó.

La foto del recuerdo; en el extremo izquierdo vemos al amigo de Zoilo; en seguida Luis González Sosa, Arturo Ortiz Marbán, Héctor Barrera Jiménez, Bruno Pecero Ríos, Sergio Quezada Ramírez y Memo Cázares Aguilera; sentados: Joel Narváez Limón, Luis Rolando Figueroa Noriega, Armando López Mendoza, Luis Alberto Fonseca Brambila y al fondo Nacho Fromow García (Arturo López Martínez se retiró más temprano)

Arturo y Zoilo con sus amigos.

Mi tocayo Luis González Sosa y Arturo Ortiz marbán.

Arturo y otro de sus amigos.

Y para cerrar con broche de oro, esta foto en donde compartimos Zoilo, Luis Rolando, el amigo de Zoilo y Sergio, mientras en la mesa posterior alcanzamos a ver a los jugadores.

Ya ni a cuatro llegamos.

Debido a alteraciones del clima, a las intensas lluvias, a malestares de salud y a otros imprevistos, no pudimos completar el cuarteto para la ronda de dominó, pero la presencia de mi nieto Alain y de Raúl, el hijo de Felícitos, nos permitió disfrutar, aún con las inconsistencias propias de quienes creen que este juego consiste en tirar las fichas sin ton ni son. En la foto podemos ver a Raúl, Luis Rolando Figueroa Noriega, Luis Alberto Fonseca Brambila, Sergio Quezada Ramírez y Alain.

Quizá lo más sobresaliente fue el tremendo tarro de cerveza que Raúl ingirió como si nada, además de la extraordinaria Botana.

Cuyo primer tiempo fue este caldo de camarón bien picoso, como debe de ser.

Y como alternativa, un platón del exquisito "Pozolillo Jalisciense", cuya diferencia con el pozole estriba en el tipo de maíz.

Como segundo tiempo, una ración algo más que generosa, de espagueti a la Boloñesa.

Y como opción, para los que no gustan de la pasta, unos camarones al ajillo.

El platillo principal consistió en un estupendo Rib-Eye con ensalada de lechuga, rodajas de jitomate y de cebolla, aderezada con aceite de oliva.

Y como segunda opción, esta arrachera con papas a la francesa.