Cumpleaños de Luis Rolando

Hoy, lunes 1° de abril, nos sorprendió Zoilo no solo porque llegó más temprano que lo habitual, sino por su elegante traje que para estas alturas ya es algo inusitado. Nos explicó que había asistido a una ceremonia solemne en la Embajada de Rusia, lo que aprovechó para entregar al festejado la tradicional Matrioshka y un vodka importado directamente de ese país

El festejado (que era yo), en medio de Boni y Zoilo con mi botella de vodka.

En eso estábamos cuando llegaron Lobito y Lupita.

Y de repente, todos hicieron su aparición; Raúl muy amablemente (segundo de izquierda a derecha) me entregó una botella de vino tinto italiano solo para demostrar que Felícitos, o sea su papá, no se olvida de nosotros.

Sin ningún preámbulo, Zoilo alzó su copa para hacer el primer brindis.

Pero fue interrumpido por la llegada de mi tocayo Luis G. y de Arturo López, quien me obsequió otra botella de vino tinto y otro vodka, que por una mera coincidencia, también era ruso. Entonces Zoilo repitió su discurso pero despojándose de la corbata, prenda que no es muy cómoda en tiempos de calor.

Una panorámica de la mesa que La Rambla nos montó en el Salón Dalí.

Enseguida nos sirvieron el primer tiempo: el clásico caldo de camarón.

Captamos a Joel, esperando turno. 

Mientras al fondo, mi tocayo, Arturo y Zoilo brndaban.

Brindis que fue secundado por Lobito y Lupita.

Héctor, Raúl y Alain.

Notamos que el único que no tomaba vino era Joel.

Quien a la hora del brindis prefería su vodka.

El segundo tiempo consistió en un coctel de camarones servido en tazón sopero.

Y como platillo principal, estas fajitas de pollo.

Preparadas con cebolla, pimientos rojos y verdes, acompañado de una porción bastante generosa de arroz blanco.

En cambio Joel, para no desentonar, pidió una pequeña torta de milanesa.

Lo mismo que Héctor, solo que ésta fue de pierna.

El atractivo del pastel no fue su tamaño, sino las velas con el No.85 y la compañía: de pie, Alain, Sebastián, Héctor Barrera Jiménez, Raúl, Zoilo Mendoza Núñez, Arturo López Martínez, Joel Narváez Limón, Memo Cázares Aguilera, Luis González Sosa, Armando López Martínez y Lupita; sentados, Bonifacio Vergara Gayosso, Luis Rolando Figueroa Noriega y Beto Hidalgo Cano. En la mesa podemos ver algunos de los regalos.

El protocolo se cumplió al apagar las velas.

Finalizamos la jornada con la jugada de dominó; en esta mesa Lobito y Zoilo en contra de Luis Rolando y Beto.

Y en ésta, Boni y Joel en contra de Memo y Héctor.

 

Semblanza de Bruno Pecero Ríos

Bruno Pecero Ríos. Foto 9 de diciembre del 2021.

 

San Javier el Cazadero, Municipio de Ozuluama de Mascareñas. Edo de Veracruz.

Bruno Pecero Ríos nació el 6 de octubre de 1937 en la Municipio de Ozuluama de Mascareñas, Veracruz, siendo sus padres Don Benito Pecero Pérez, campesino y Caporal en ranchos de la región y su esposa Doña Francisca Ríos Garza, nacida en Altamira, Tamaulipas.

 

Siendo el 6to de 8 hermanos del matrimonio.
Sus Hermanos:
Lucía +
Alfonso
Amado +
Aurelio + 

Martín +

Gumersindo +
Salomón

Por las limitaciones propias de la región, se vio en la necesidad de estudiar la primaria y secundaria en Tampico, viviendo en 1955 la catástrofe del huracán Hilda.

En 1954 inició la educación Vocacional en el Instituto Tecnológico de Ciudad Madero, teniendo altas y bajas tras el fallecimiento de su padre en 1957, suceso que lo marcó emocionalmente.

En 1958 llegó a la Ciudad de México con el propósito de hacer su examen de admisión en el Instituto Politécnico Nacional, el cual aprobó con éxito y así dio inicio a la carrera de Ingeniería Mecánica en la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica de Zacatenco, siendo parte de la primera generación de Ingenieros Mecánicos de dicha Institución, inaugurada por el Presidente Adolfo López Mateos y Eugenio Méndez Docurro, como Director del Instituto Politécnico Nacional,

 

En 1962 terminó sus estudios e ingresó a la primera empresa trasnacional Johnson & Johnson de México teniendo el puesto como Jefe de Producción, en dónde manejó al personal para la elaboración de gasas para hospitales, pañales desechables, aceites para niños, cepillos dentales, banditas, etc.

 

Pasó a ser Jefe de Mantenimiento Preventivo y Mantenimiento Regular, capacitándose para actualizarse en áreas de producción. Estando en más de 3 ocasiones en la matriz de la empresa ubicada en Brownsville, Texas, en los Estados Unidos recibiendo diversos entrenamientos.

 

Fue también comisionado en 3 ocasiones para tomar cursos de seguridad de sistemas contra incendios para manejo de extinguidores, bombas contra incendio y todo tipo de seguridad.

Fue Jefe de Ingeniería, teniendo la fortuna de fabricar máquinas para servicios de la misma empresa, máquina para hacer gasas para hospitales, máquinas complicadas con más de mil piezas en movimiento simultáneo, con planos de Estados Unidos, fabricadas en tierras mexicanas y con personal mexicano.

 

Tuvo la oportunidad de modificar los sistemas contra incendios que en aquel entonces ya eran anticuados, y hacer los cálculos necesarios para la fabricación de un generador de vapor ya que el que se tenía, no era suficiente para las necesidades de la empresa.

 

Presentó el proyecto que fue enviado a Estados Unidos, siendo aprobado, y así mismo siendo el principio para hacer su tesis profesional en 1968. Le aprobaron el proyecto, recibiendo todo lo necesario para hacer realidad el proyecto del generador de vapor.

 

Tuvo la suerte de cambiar la subestación eléctrica para mayor capacidad porque Johnson & Johnson crecía, aumentando la producción.

Al ser Gerente de Ingeniería fue comisionado a Puerto Rico para capacitarse en la elaboración de mangos para cepillos dentales. Fue comisionado a Brasil para hacer dos máquinas de toallas sanitarias, y la elaboración de una máquina para hacer limpiadores auditivos (cotonetes), con la cual tuvo la suerte de ver la fabricación de la máquina desde el principio en Alemania, fue capacitado para la instalación de la misma máquina en México y adecuarla para ser utilizada, así mismo fue el encargado de capacitar al personal. Culminando así exitosamente su carrera como Ingeniero Mecánico en la empresa Johnson & Johnson después de 16 años de servicio.

En 1978 empezó su servicio en Petróleos Mexicanos iniciando de cero como ayudante de mecánico, posteriormente como dibujante ya teniendo un antecedente previo a sus años de servicio en Johnson & Johnson, como transitorio en varios lugares de la República como San Luis Potosí, Altamira, Tamaulipas y la refinería de Ciudad Madero.

Ingresó a Pemex con el apoyo del sindicato, iniciando con el nivel 3 hasta llegar al nivel 15 como dibujante, posteriormente ascendido al nivel 21 como Supervisor de Seguridad Industrial dando cursos contra incendios a las guardias de perforación para capacitarlos en el manejo de extinguidores, bombas contra incendio, cómo apagar un pozo, el peligro que implicaba manejar el crudo extraído del pozo conteniendo altas temperaturas, altas presiones y altos contenidos de gases con productos venenosos. Había que preparar al personal para colocarse mascarillas y el protocolo a seguir cuando un trabajador se envenenara con gases, ya que se contaban con 3 minutos para brindarle primeros auxilios antes de que el daño fuera mortal.

El sindicato le pidió militancia, dando clases en una preparatoria sindical de Cálculo Diferencial, Dibujo y Física. Siendo muy apreciado.

Posteriormente recibió una carta de la Dirección General de Seguridad invitándolo a trabajar en las plataformas para ser Supervisor de Producción de Pemex, recibiendo una capacitación en México con instructores muy reconocidos. Le enseñaron a vivir en plataformas, trabajando 14 días en plataformas y 14 días de descanso, estuvo 3 años trabajando de esta forma teniendo nivel 24 transitorio. Le ofrecieron nivel 28 ya con planta en la empresa como administrativo y capacitador, dando pláticas de seguridad en plataformas. Ascendiendo gradualmente hasta el nivel 37 siendo ya administrativo en Ciudad del Carmen, Campeche y en búsqueda de laborar en el entonces Distrito Federal, logrando quedar en la Sección 34. En el terremoto de 1985 fue a dar auxilio en los predios derrumbados, siendo este el motivo de que al año siguiente cambiaran las dependencias de Pemex del Distrito Federal a la Ciudad de Villahermosa, Tabasco y tiempo más tarde cambiando su sede nuevamente a Ciudad del Carmen, Campeche, trabajando en tierra y trabajando en la elaboración de un Manual para el Plan de Respuesta a huracanes en las plataformas. Que sigue vigente en la empresa.

Fue también Supervisor de Seguridad con nivel 39, en donde tuvo a su cargo 5 jefaturas que controlaban las plataformas para la aprobación de las personas contratadas por el Sindicato y siendo su responsabilidad examinar a los candidatos para ver si eran aptos para trabajar en plataformas.

Terminando la segunda mitad de su carrera de Ingeniero Mecánico como Súper Intendente de Área nivel 39 en Petróleos Mexicanos. Jubilándose a la edad de 62 años después de 25 años de servicio.

Todo esto no habría sido posible sin el apoyo, la lealtad y los cuidados de su esposa Josefina García Gutiérrez quien lo acompañó durante toda su trayectoria profesional de principio a fin y la motivación de sus hijos (Francisco, Bruno, Alfredo, Karla y Adriana) y sus nietos.

Zoilo Mendoza cumplió 84 años.

Teniendo como invitados especiales a Elvira Viñals, sus dos hijas, sus dos nietos y Raúl González Apaolaza, hoy celebramos el cumpleaños No. 84 de Zoilo Mendoza Núñez, a quien captamos cuando recibía a Lobito. Recordamos que nuestro querido Sergio, en este mes, también cumplía años.

Zoilo entre la hija de Elvira y Joel.

Raúl González Apaolaza, Elvira y su hija.

Muy diligentemente, nuestro mesero Diego servía el vino tinto con que brindaríamos por este acontecimiento; el turno era para Lobito. 

Mientras Felipe hacía lo propio con su copa de vino, paulatinamente aparecían en la mesa exquisitos manjares del mar, como estos camarones.

O como esta mojarrita.

Y estos camarones forrados de coco.

El coctel de camarones en vaso y un buen filete de pescado en salsa de chipotle.

Y es que hoy fue día de bufete; aquí vemos un extremo de la mesa.

La cámara recorriendo la vitrina con las entradas, desde una paella, hasta agua chile de varias regiones del país.

Cocteles varios como mejillones.

Cocteles de camarón y más pescados.

Ostiones, pulpos y gran diversidad de mariscos.

Ensaladas y hasta guacamole.

Zoilo tomó la palabra para agradecer nuestra compañía y encabezar el brindis de rigor que, como es su costumbre, lo hace con el vodka ruso de su preferencia, haciendo honor a su sobrenombre.

Gran emoción al pronunciar su discurso.

Que conmovidos no perdíamos detalle de sus palabras.

En cuanto terminó, llegó el pastel.

Que con un discreto soplido apagó las dos velas formando el 84.

Disfrutamos de una generosa rebanada de pastel, pero hubo algunos que no resistieron acercarse a los postres para complementar.

Algunos nos acercamos para acompañarlo en el soplido.

Se armaron las mesas de dominó, momento oportuno para que Elvira, su hija y Raúl emprendieran la retirada.

 

Pedimos nos tomaran una foto con Raúl, recordando viejos tiempos, como cuando fuera Presidente del CIME, Coordinador de las obras del  Aeropuerto de Texcoco y alguna ocasión corredor de los 1500 metros.

La foto del recuerdo; de pie, Sebastián, Zoilo Mendoza Núñez, Joel Narváez Limón, Luis Rolando Figueroa Noriega, Luis Alberto Fonseca Brambila, Beto Hidalgo Cano, mi hijo Luis Rolando Figueroa Quirino y mi nieto Alain; sentados, Lupita, Armando López Mendoza, Gonzalo Luna Abascal, Héctor Barrera Jiménez y Memo Cázares Aguilera.

 

Cumpleaños de Lupita.

Hoy 18 de marzo, día festivo, tuvimos mucho gusto en convivir con Lupita, quien celebraba su cumpleaños; aquí la vemos muy contenta en el momento de hacer su arribo a La Rambla.

Tomaban asiento Lupita, su hijo César con su esposa y el simpático sobrino que de vez en cuando nos visita.

Ahora sí, vemos a la familia ya en sus lugares; solo faltaba Sebastián quien tuvo un compromiso de trabajo.

Y por el otro lado, Felis llegaba de su largo viaje, saludando a Beto.

Nuestro mesero estrella Diego, nos recibió con este delicioso caldo de camarón.

Que algunos lo cambiaron por esta sopa de fideo.

Momento oportuno para hacer nuestro tradicional brindis.

Como segundo tiempo, nos ofrecieron este arroz blanco con plátanos fritos.

Y como segunda opción, un coctel de camarones frescos provenientes de La Viga.

Y como platillo principal, lo que llaman "Alambre de Mariscos", un guiso muy bien surtido, condimentado y con bastantes verduras.

No faltó quien le hiciera el feo a los mariscos, optando por la clásica torta de milanesa, que alcanza para cenar y desayunar al día siguiente

Terminada la comida, captamos muy contentos a César, el hijo de Lobito y a Alain, mi nieto, satisfechos de tanto comer.

Rematamos con la jugada de dominó; en una mesa podemos ver a Beto y a Héctor.

En esta otra, a Joel y a Felis.

Los asistentes: de pie, Felícitos Hernández Zúñiga, Héctor Barrera Jiménez, el sobrino de Lobito, Luis Alberto Fonseca Brambila, Beto Hidalgo Cano y Joel Narváez Limón; sentados, Felipe Varea Gilabert, Luis Rolando Figueroa Noriega, Lupita, Armando López Mendoza "Lobito" y Luis González Sosa.